La situación de las ISAPREs
Una situación crítica. Así es como define Gonzalo Simón, presidente de la Asociación de ISAPREs, la situación por la que pasan las aseguradoras privadas de salud en Chile. Y es que según las cifras que detallan, durante el primer semestre del año 2022, anotan pérdidas por $73 mil millones de pesos, cifra que si también considera el año 2021, alcanza pérdidas por $222 mil millones.
A juicio de Simón, son varios los factores que condujeron a esta situación. En principio el congelamiento de precios de los planes de salud entre el año 2020 y mediados de 2022. También se apreció un importante aumento de las consultas médicas, principalmente porque la gente está dando atención a condiciones o afecciones que no había podido atender con anterioridad, y en último lugar la alta prevalencia de enfermedades de salud mental que presenta la población, muy poco visibilizadas años atrás, pero en un constante incremento durante los últimos años.
Según las ISAPREs, cerca de 3.5 millones es el universo de beneficiarios que podrían verse en peligro de perder su cobertura de salud, en caso que alguna de las 6 ISAPREs abiertas en Chile entre en inviabilidad de pagos. Incluso para ilustrar la situación actual, entra al caso ejemplificar con Clínica Alemana, quien con fecha 28 de Julio, mediante una carta informaba la eliminación del convenio de atención preferente para usuarios afiliados a ISAPREs Nueva MasVida y Consalud, aludiendo a una importante acumulación de deudas impagas por parte de las aseguradoras y a un importante atraso en el plazo de pago de 60 días que existe actualmente.
Dentro de los problemas que podrían producirse, podemos mencionar dos que surgen de manera inmediata: qué pasa con las personas afiliadas a una empresa que quiebra y qué pasa con todo el sistema de empresas cuando una empieza a quebrar.
Es el primero de estos puntos, el que más revuelo pareciera causar. Hecho, que va justamente en línea con la carta que emitió el gremio “Clínicas Chile” a la Superintendencia de Salud, donde expresan su preocupación sobre la cuantía de las garantías que mantienen las aseguradoras, las cuales, a su juicio, no son suficientes para cubrir la totalidad de las deudas existentes. Al momento de referirse a cifras, desde el gremio aseguran que el total de montos adeudados asciende en mayo de este año a $447 mil millones de pesos, mientras que las garantías existentes solo alcanzarían a cumplir como máximo el 50% de este monto.
Sin embargo, existen algunas voces que marcan en parte la interrogante respecto a esta situación, y ponen sobre la mesa que ésta era una situación que se venía arrastrando desde hace mucho tiempo. Uno de ellos es el Secretario General del Colegio Médico, José Miguel Bernucci quien afirma sobre el sistema de aseguramiento privado que: “en términos de aseguramiento, en términos de rentabilidad, es un sistema muy ineficiente y que lamentablemente está condenado al fracaso hace muchísimos años”.
Cuando fue consultada la ministra de Salud, María Begoña Yarza, sobre cómo se evitaría una eventual quiebra de las isapres, ella sostuvo: “Las Isapres, como las conocemos, llevan más de 20 años con ganancias consecutivas, (...), el 2021 ha sido un año en que han tenido pérdidas, pero nos imaginamos que hay una provisión de recursos, como institución de la seguridad social, para que en esos momentos de disminución de recursos pueda salvar ese año”.
De esta forma, y pese a que en la legislación chilena se haya creado en el año 2003 una Ley de Insolvencia de las Isapres, con fecha 18 de agosto se dió inició a una mesa de trabajo entre el Ministerio de Salud y la Asociación de Isapres. En esta instancia, donde se han sumado el Director de Fonasa, el superintendente de Salud y representantes de todas las aseguradoras que componen el gremio de Isapres, los objetivos principales perseguidos aseguran ser otorgar soluciones a la situación del sistema de isapres, en primer lugar, para así dar seguridad a las personas afiliadas a aquellas instituciones en más riesgo actualmente, para en segundo lugar comenzar a trabajar en las modificaciones a realizar, para dar paso a la reforma del sistema.
Esta instancia ya ha culminado su segunda reunión, incorporando en sus temáticas el fallo de la Corte Suprema donde se dejó sin efecto el alza en los precios de los planes de salud que las isapres habían anunciado a sus afiliados. En esta línea, la ministra de Salud afirmó el día viernes 26 de agosto que las Isapres efectivamente podrán aplicar un alza de precio en los planes de salud, pero que estas deberán estar debidamente justificadas, abordando la temática con “seriedad y datos”.
Durante esta última aparición de la principal autoridad sanitaria, se dieron luces de los frutos que esperan de esta mesa, donde recalca abordarán la situación respecto a las licencias médicas, con una serie de acciones a corto plazo que ven factibles, adelantó que durante la siguiente semana comenzará una mesa de trabajo en conjunto con la Asociación de Clínicas y confirmó que independientemente del resultado del plebiscito, la reforma del sistema de salud es parte del programa de Gobierno y uno de sus compromisos.
Sobre las propuestas de reforma…
Ya sea proveniente desde el Gobierno o desde la Convención Constitucional, las intenciones de reforma tomarán forma en el debate próximo, y el futuro de las ISAPREs pareciera estar más cercano a una modalidad de seguros privados complementarios, siendo fiel al deseo del ejecutivo, de implementar un Servicio Nacional de Salud, cuya base de desarrollo sea la atención primaria universal.
Bajo esta premisa son varias las ideas que chocan al momento de proponer que sea otro el sistema bajo el cual se administren las cotizaciones de salud de los chilenos. Por ejemplo, el Director de Fonasa, Camilo Cid: “la idea es que (las ISAPREs) desaparezcan del mapa de la seguridad social y sólo participen en el mundo de los seguros complementarios, pero ahora declaradamente privados”, al mismo tiempo que defiende la idea que reunir los recursos provenientes de las cotizaciones junto con los aportes fiscales, permitirá que toda la población pueda ser beneficiada con altos niveles de calidad y acceso.
Desde el lado de aquellos que no ven con tan buenos ojos el cambio en el sistema, sus principales argumentos giran en torno a que la mancomunación del sistema generará una presión que complejizaría la situación actual de atenciones. Por ejemplo, Luis Castillo, decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la U. Autónoma, dice: “El sistema público tal como está no podría absorber toda la demanda. Es fundamental que el sistema de salud esté integrado. De no integrar al sector privado, lo más probable es que las listas de espera aumenten, pero de incluirlo dentro del sistema nacional con una buena gestión, puede jugar un rol fundamental para resolver las listas”.
De esta manera, de las pocas certezas se pueden extraer es que este sistema de aseguramiento como lo conocemos está viviendo sus últimos momentos. Parte importante del debate quedará para los legisladores encargados de definir la forma de este nuevo sistema, quienes ya cuentan con importantes insumos sobre lo que se hizo de manera correcta y los fallos que terminaron llevando a estas instituciones a una situación tan crítica como la de hoy.
Referencias:
- https://www.minsal.cl/exitosa-primera-reunion-de-trabajo-con-asociacion-de-isapres/